Ventajas de disponer de un agente inmobiliario.
Es importante contar con un especialista para entrar en el mercado inmobiliario.
Ante de entrar en el mercado hay que asegurarse de buscar una inmobiliaria con experiencia, experta y que forme parte de una asociación de profesionales inmobiliarios.
El agente, apoyado en su experiencia y conocimiento del mercado, es un apoyo fundamental del vendedor para determinar el precio realista, más en estos tiempos donde tantas convulsiones han azotado al mercado.
Si se quiere comprar, el agente ofrece propiedades que se ajustan a las preferencias y necesidades del comprador, lo que hace ahorrar tiempo y evita la frustración de ir visitando propiedades a ciegas sin un filtro previo.
El seguimiento del agente inmobiliario hace poder contactar con vendedores o compradores sin que se resienta la posición negociadora y manteniendo informado al cliente de los pasos dados.
Pero la agencia inmobiliaria no es únicamente un medio para buscar un inmueble o para venderlo. Además de la faceta comercial y de publicidad, lleva el peso de la negociación y el asesoramiento en la recopilación de documentos y la elaboración de los contratos que resulten necesarios.
Una vez firmado el contrato privado, el agente inmobiliario cobra sus honorarios, pero no por ello termina el trabajo, ya que ayuda a recopilar la documentación y acompaña en todo el trámite notarial, con lo que los clientes nunca se sienten desamparados en un proceso que generalmente desconocen y no controlan.